Los cepillos C·Ramic combinan tecnología cerámica e iónica para potenciar el brillo del cabello al máximo.
Sin daños, ni roturas. Además, con la cobertura cerámica del tubo, consiguen un brushing perfecto en menos tiempo.
¿El resultado? Un cabello más fuerte y mucho más brillante.
Las fibras ionizadas de alto rendimiento también resisten al calor y tienen mayor capacidad de recuperación.
La colocación perpendicular de las mismas permite una mejor penetración y agarre del cabello, haciendo que se deslice mejor sobre el cepillo.
El mango está hecho de polipropileno, un material muy resistente y antiadherente que evita que el cabello se pegue al mango.
Además, incorpora una púa, en la parte inferior, que sirve para separar mechones de cabello con el mismo cepillo mientras moldea, ahorrando así tiempo y ganando confort.
Cepillo de 6cm de diámetro (sin púas).